Los falsos medicamentos son una realidad que negamos aceptar o simplemente la tapamos cegados por nuestra cultura de consumismo. Que duda cabe, éstos son el lado oscuro de la ciencia, son la suma de ambiciones sobredimensionadas que nos regala la sociedad neoliberal. A los fabricantes de fármacos más les importa mejorar sus ganancias y no los malestares de los quejosos pacientes tercermundistas.
Cifras estadísticas de la DIGEMIN informan que en el Perú se instalaron un total de 15,999 establecimientos farmacéuticos (2342 Farmacias, 9695 Boticas, 2135 droguerías, 394 laboratorios y 1433 importadores de medicamentos).
El mayor incremento se ha registrado en los últimos 6 años. Se sabe que en el año 2000 los peruanos hemos consumido 175 millones de dólares en medicinas, esta cifra es inferior a los consumido en 1980, sin embargo ahora consumidos más de 650 millones de dólares.
De aquí podemos deducir que el consumo de los medicamentos en el Perú creció en estricta proporción a las ganancias proyectadas de las farmacias extranjeras y sobre todo chilenas (Inka Farma, Fasa, BTL), y en clara desproporción a nuestras dolencias; o es que en los últimos 6 años nuestras enfermedades se agravaron.
Si es preocupante el elevado consumismo de medicamentos, más preocupante es el consumo de fármacos de dudosa procedencia. A nivel mundial el comercio ilegal de medicamentos alcanza el 10 por ciento, mientras que el Perú esta cifra asciende al 25 por ciento.
La realidad de Puno es peor aún. La máxima autoridad en asuntos de salud, ha confirmado que casi la mitad de los medicamentos que se expenden en farmacias y boticas son de dudosa procedencia. Para ser precisos, un 45 por ciento de los fármacos que se venden, no son confiables, son ilegales, son de contrabando, es decir, no está comprobado su efectividad pero igual se venden en farmacias y boticas, que en estos días abundan como si se tratara de cabinas de Internet.
Visto de esta manera, de que sirve cumplir de manera estricta las indicaciones del médico, si los medicamentos no son confiables.
Una cosa debe quedar en claro, en los últimos 6 años, hemos engrosado los capitales de la grandes cadenas de farmacias y sobre todo chilenas, encima los medicamentos que nos vendieron son ilegales. Algo más grave, en estos últimos años también hemos dejado atrás la medicina alternativa, esa que hemos heredado de nuestros antepasados, la hemos reemplazado en muchos casos por medicamentos bamba.
26 de abril de 2007
24 de abril de 2007
Algo anda mal en la Universidad del Altiplano
Los estudiantes de la Universidad Nacional del Altiplano, hoy, de manera recurrente protagonizan diversas protestas que consisten esencialmente en tomar la ciudad universitaria; es decir, cerrar el paso de la puerta principal y otras vías de acceso peatonal y vehicular, para ser escuchados por la autoridad.
No es de trascendencia analizar si son fundadas o no las tomas de locales, porque las justificaciones y medidas reivindicativas sobran al interior de cada institución u organización, el problema es cuando estas formas de protestas afectan al derecho a los demás y sobre todo denotan el empobrecimiento de la formación política que antes era algo brillante.
Un ramillete de universitarios, que en la época del gobierno de Fujimori, estuvieron arrinconados o adormecidos, hoy frustran las expectativas de los que vienen a cumplir con sus actividades académicas, con el único afán de conseguir cierto liderazgo para las próximas elecciones; dicho de otra manera, alimentar el ego propio y atribuirse una representación estudiantil para exigir en nombre de todos la solución de una problemática pendiente en cualquier organización.
No vamos a decir que, antes de que Fujimori arremeta con tanques y soldados a las universidades -los universitarios cada lunes izaban la bandera como colegiales- las cosas funcionaban color de rosa, no es así, las universidades siempre fueron focos de formación política y liderazgos, el problema es que ahora lo hacen sin lo primero. Es decir, la universidad peruana ya no es un centro de formación política, es más, ni se discute de política como miras a un progreso de este país en vías de desarrollo. Si hoy se habla de política se habla de la manera más superficial. Los universitarios hablan de política y la interpretan casi o peor que una ama de casa informada.
Hoy los universitarios ya no son más los entendidos en filosofía; los estudiantes están lejos de las polémicas y adiestramiento de la izquierda radical en su diversas manifestaciones y nombres, peor aun, ni siquiera están las polémicas moderadas, constructivas y responsables, tal como los exigiría la sociedad de hoy, no hay nada de eso, lo que hoy es constante son las tomas de local.
Así están las cosas en la universidad puneña, los escasos liderazgos se forman a punta de tomas de locales y arengas nocturnas. ¿Qué podremos esperar en los próximos años de estos líderes que en buena cuenta son los que dirigirán los destinos de la región altiplánica?.
Otra interrogante más, ¿Qué está mal en la universidad, los docentes o los discentes?. Si los segundos son meros repetidores de conocimientos e investigaciones foráneas, algo de responsabilidad deben tener los primeros. A nuestro parecer, el liderazgo universitario debe partir por los que se hacen llamar catedráticos.
No es de trascendencia analizar si son fundadas o no las tomas de locales, porque las justificaciones y medidas reivindicativas sobran al interior de cada institución u organización, el problema es cuando estas formas de protestas afectan al derecho a los demás y sobre todo denotan el empobrecimiento de la formación política que antes era algo brillante.
Un ramillete de universitarios, que en la época del gobierno de Fujimori, estuvieron arrinconados o adormecidos, hoy frustran las expectativas de los que vienen a cumplir con sus actividades académicas, con el único afán de conseguir cierto liderazgo para las próximas elecciones; dicho de otra manera, alimentar el ego propio y atribuirse una representación estudiantil para exigir en nombre de todos la solución de una problemática pendiente en cualquier organización.
No vamos a decir que, antes de que Fujimori arremeta con tanques y soldados a las universidades -los universitarios cada lunes izaban la bandera como colegiales- las cosas funcionaban color de rosa, no es así, las universidades siempre fueron focos de formación política y liderazgos, el problema es que ahora lo hacen sin lo primero. Es decir, la universidad peruana ya no es un centro de formación política, es más, ni se discute de política como miras a un progreso de este país en vías de desarrollo. Si hoy se habla de política se habla de la manera más superficial. Los universitarios hablan de política y la interpretan casi o peor que una ama de casa informada.
Hoy los universitarios ya no son más los entendidos en filosofía; los estudiantes están lejos de las polémicas y adiestramiento de la izquierda radical en su diversas manifestaciones y nombres, peor aun, ni siquiera están las polémicas moderadas, constructivas y responsables, tal como los exigiría la sociedad de hoy, no hay nada de eso, lo que hoy es constante son las tomas de local.
Así están las cosas en la universidad puneña, los escasos liderazgos se forman a punta de tomas de locales y arengas nocturnas. ¿Qué podremos esperar en los próximos años de estos líderes que en buena cuenta son los que dirigirán los destinos de la región altiplánica?.
Otra interrogante más, ¿Qué está mal en la universidad, los docentes o los discentes?. Si los segundos son meros repetidores de conocimientos e investigaciones foráneas, algo de responsabilidad deben tener los primeros. A nuestro parecer, el liderazgo universitario debe partir por los que se hacen llamar catedráticos.
17 de abril de 2007
¿Cómo elevamos la autoestima del maestro?
Es harto conocido que en enero del presente año, luego de las evaluaciones que enervaron los ánimos de los sutepistas, el magisterio peruano se despojó de los harapos que le cubrían, se desnudó y evidenció lo que era conocido a medias voces, los maestros no son el mejor ejemplo. Un número que casi alcanza la mitad no resuelve problemas aritméticos simples y un poco más del tercio no alcanza una comprensión mínima en lectura.
Así de grave está la situación del maestro peruano, años tras año fue perdiendo la confianza, la admiración y el respeto. Atrás quedó el otrora maestro que era protagonista de los principales cambios de la sociedad, el maestro ya no es más el respetable hombre ejemplo de las otras profesiones, y en la actualidad es la última profesión que los jóvenes de hoy quieren seguir.
Como si no fuera suficiente para convencernos que el magisterio pasa por un mal momento, quien sabe por cuanto tiempo más estará en este estado, otra vez en marzo, los resultados de una evaluación realizada por la Universidad Nacional del Altiplano a los más de 10 mil maestros que postularon a contratos en nuestra región, nos cachetea, señalándonos que sólo 326 maestros superaron la nota aprobatoria.
Días después, como si el destino le dijera basta a la grave situación de la educación, más 2 mil 500 postulantes a institutos pedagógicos y escuelas artísticas se sometieron a una evaluación y sólo 52 logran cruzar la nota mínima. La evaluación sin precedentes se realizó en cumplimiento a la norma emanada por el gobierno de Alan García, Según indica esta norma los aspirantes a ser maestros, desde el presente año, deberán obtener como mínimo la nota de 14, para luego pasar a la segunda etapa de la evaluación, que consistente en test psicológico y vocacional.
¿Entonces que esperamos para mejorar la situación de la educación y del maestro en particular? ¿Cómo hacemos para elevar la autoestima del maestro?.
Para mejorar la realidad educativa y la autoestima de los maestros, es necesario recobrar el tiempo perdido, empecemos por reconocer cuánto hemos hecho cada uno de nosotros por la educación. Exijamos en nuestra escuela, calidad antes que cantidad, ya no engañemos más a las futuras generaciones.
Para recobrar el sitial que tenía el maestro es necesario un esfuerzo mancomunado de todos los actores, pero más que ello es necesario que los más 10 mil docentes sin contrato y los 21 mil maestros que están en ejercicio, muestren disposición para mejorar y elevar la educación peruana o simplemente que den un paso al costado, para que otros hagan por ellos lo que no hicieron en años.
Así de grave está la situación del maestro peruano, años tras año fue perdiendo la confianza, la admiración y el respeto. Atrás quedó el otrora maestro que era protagonista de los principales cambios de la sociedad, el maestro ya no es más el respetable hombre ejemplo de las otras profesiones, y en la actualidad es la última profesión que los jóvenes de hoy quieren seguir.
Como si no fuera suficiente para convencernos que el magisterio pasa por un mal momento, quien sabe por cuanto tiempo más estará en este estado, otra vez en marzo, los resultados de una evaluación realizada por la Universidad Nacional del Altiplano a los más de 10 mil maestros que postularon a contratos en nuestra región, nos cachetea, señalándonos que sólo 326 maestros superaron la nota aprobatoria.
Días después, como si el destino le dijera basta a la grave situación de la educación, más 2 mil 500 postulantes a institutos pedagógicos y escuelas artísticas se sometieron a una evaluación y sólo 52 logran cruzar la nota mínima. La evaluación sin precedentes se realizó en cumplimiento a la norma emanada por el gobierno de Alan García, Según indica esta norma los aspirantes a ser maestros, desde el presente año, deberán obtener como mínimo la nota de 14, para luego pasar a la segunda etapa de la evaluación, que consistente en test psicológico y vocacional.
¿Entonces que esperamos para mejorar la situación de la educación y del maestro en particular? ¿Cómo hacemos para elevar la autoestima del maestro?.
Para mejorar la realidad educativa y la autoestima de los maestros, es necesario recobrar el tiempo perdido, empecemos por reconocer cuánto hemos hecho cada uno de nosotros por la educación. Exijamos en nuestra escuela, calidad antes que cantidad, ya no engañemos más a las futuras generaciones.
Para recobrar el sitial que tenía el maestro es necesario un esfuerzo mancomunado de todos los actores, pero más que ello es necesario que los más 10 mil docentes sin contrato y los 21 mil maestros que están en ejercicio, muestren disposición para mejorar y elevar la educación peruana o simplemente que den un paso al costado, para que otros hagan por ellos lo que no hicieron en años.
10 de abril de 2007
La Pandilla Puneña
El último sábado en Juliaca se realizó el vigésimo quinto Concurso de Marinera y Pandilla Puneña, esta actividad sui generis en Semana Santa, se realiza años tras año con el mismo entusiasmo. Cuando el mundo cristiano aun esta esperando la resurrección de Jesucristo, los juliaqueños nos presentan la tradicional danza pandillera, propia del altiplano y practicada en toda la región. Se baila en semana santa, al igual que otras danzas propias de nuestra región como el Soldado Palla Palla, Sikuris, Maris y otras.
La pandilla es característica principal del carnaval puneño. Nace entre los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX, producto de la fusión del huayño y la cuadrilla española y se mantiene con algunas modificaciones hasta hoy.
La historia señala que las cholitas puneñas invitaban a jóvenes de sociedad a bailar con ellas como su pareja; los señoritos aceptaban pero avergonzados y para no ser reconocidos se tapaban la cara inclinando el sombrero y se enrollaban mucha serpentina en el cuello para cubrirse aún más la cara.
La danza nació en la ciudad lacustre a orillas del Lago Titicaca y se ha extendió por toda la región en los años 50, 60 y 70. Centros Musicales como los de Juliaca, Azángaro, Ayaviri, Huancane, Moho, Ilave realzaron el huayño pandillero al igual que Unión Puno, Union Juliaca, Tehodoro Valcárcel, Conjunto Orquestal Puno, Centro Musical Puno, Estudiantina Puno y la misma Tuna Universitaria.
Maestros de la música como Rosendo Huirse, Teohodo Valcárcel, Edgar Valcárcel, Carlos Rubina Burgos, Andres Dávila, Mariano Béjar, Alberto Rivarola, Zacarías Puntaca, Victor Masias, Pompeyo Aragón, Felipe Sanchez y otros exponentes encumbraron al departamento de Puno y le hicieron uno de los mejores tributantes de música andina.
Pero en los 10 últimos años la pandilla ha ido perdiendo terreno, los trajes luminosos de la morenada y diablada han opacado al huayño pandillero. Debemos aplaudir la iniciativas de las instituciones educativas, en Juliaca los escolares van por el VI festival de Marinera y Pandilla Puneña, mientras que en Puno las exhibiciones de marinera y pandilla que realizan los escolares.
Los carnavales y semana santa seguirán siendo el mejor espacio para demostrar el coqueteo de cholita pandilleras y la galantería de los varones; los hay en Azángaro, en Ayaviri, en Huancané y otras provincias, pero no es suficiente para decir que esta danza se perennizará. Es necesario generar mayor actividad en las escuelas y colegios; la tarea es de la Federación Departamental de Centros Musical y Estudiantinas de Puno y la Asociación de Conjuntos Pandilleros de Juliaca y de todas las organizaciones
La pandilla es característica principal del carnaval puneño. Nace entre los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX, producto de la fusión del huayño y la cuadrilla española y se mantiene con algunas modificaciones hasta hoy.
La historia señala que las cholitas puneñas invitaban a jóvenes de sociedad a bailar con ellas como su pareja; los señoritos aceptaban pero avergonzados y para no ser reconocidos se tapaban la cara inclinando el sombrero y se enrollaban mucha serpentina en el cuello para cubrirse aún más la cara.
La danza nació en la ciudad lacustre a orillas del Lago Titicaca y se ha extendió por toda la región en los años 50, 60 y 70. Centros Musicales como los de Juliaca, Azángaro, Ayaviri, Huancane, Moho, Ilave realzaron el huayño pandillero al igual que Unión Puno, Union Juliaca, Tehodoro Valcárcel, Conjunto Orquestal Puno, Centro Musical Puno, Estudiantina Puno y la misma Tuna Universitaria.
Maestros de la música como Rosendo Huirse, Teohodo Valcárcel, Edgar Valcárcel, Carlos Rubina Burgos, Andres Dávila, Mariano Béjar, Alberto Rivarola, Zacarías Puntaca, Victor Masias, Pompeyo Aragón, Felipe Sanchez y otros exponentes encumbraron al departamento de Puno y le hicieron uno de los mejores tributantes de música andina.
Pero en los 10 últimos años la pandilla ha ido perdiendo terreno, los trajes luminosos de la morenada y diablada han opacado al huayño pandillero. Debemos aplaudir la iniciativas de las instituciones educativas, en Juliaca los escolares van por el VI festival de Marinera y Pandilla Puneña, mientras que en Puno las exhibiciones de marinera y pandilla que realizan los escolares.
Los carnavales y semana santa seguirán siendo el mejor espacio para demostrar el coqueteo de cholita pandilleras y la galantería de los varones; los hay en Azángaro, en Ayaviri, en Huancané y otras provincias, pero no es suficiente para decir que esta danza se perennizará. Es necesario generar mayor actividad en las escuelas y colegios; la tarea es de la Federación Departamental de Centros Musical y Estudiantinas de Puno y la Asociación de Conjuntos Pandilleros de Juliaca y de todas las organizaciones
6 de abril de 2007
Jesús es crucificado en el Titicaca
Jesús nació y vivió en Palestina hace dos mil años. Todos los datos que conocemos son gracias a los evangelios o relatos escritos por sus discípulos. La prédica de Jesús como hijo de Dios iba contra las creencias de la religión judía y su actitud fue considerada como una blasfemia, entonces el mismo gobernador romano Poncio Pilatos lo condenó a muerte, obligándolo a cargar la cruz hasta el monte Gólgota.
En semana santa, una publicidad local producida por Candamo Films dirigida por Roberto Mercado, nos hace recordar la trágica muerte de Jesús. Lejos de gólgota o de Belén, la historia de la crucifixión de Jesucristo se repite todos los días en el lago Titicaca. La incultura ambiental, la indiferencia del hombre, la falta de conciencia de nuestros coterráneos, está matando al lago.
Ese lago que se pintaba como sagrado, milenario, turístico, misterioso, ahora se pinta como descuidado, desagradable y hasta abominable y putrefacto; o sino preguntemos como imagina nuestro lago un niño que asiste a educación inicial.
Las muñecas de Jesús esta vez son clavadas en el Titicaca. Cada vez que quemamos totorales, cada vez que echamos basura, cada vez que miccionamos o evacuamos en la bahía interior de Puno, el sufrimiento de la madre de la naturaleza se asemeja al sufrimiento de Jesús en la cruz.
Las inoperancia de la instituciones como el PELT, ALT, EMSA-Puno, Municipalidad Provincial de Puno y Gobierno, que según el Colegio de Ingenieros, en los últimos 30 años gastaron más 30 millones de soles en proyectos y nada en ejecución de obras, son para el Titicaca, lo mismo que sintió Jesús con la imposición de la corona de espinas.
De no ser el egoísmo y la traición que impera en los gobiernos de turno, la situación actual del lago ha podido ser diferente. Estos pésimos funcionarios son los Judas de hoy, malgastaron los fondos del estado peruano y de la cooperación internacional. Estos son los que juran ser hijos de Dios, y con su egoísmo son los primeros que afectan a la naturaleza. Claro, estos malos ejemplares están en todo lado, también los hay en Bolivia y en toda la circunscripción del Titicaca.
En Semana Santa, el milenario Titicaca, también pide clemencia y espera que tomemos una actitud de cambio, de lo contrario estamos condenados a perderlo.
En semana santa, una publicidad local producida por Candamo Films dirigida por Roberto Mercado, nos hace recordar la trágica muerte de Jesús. Lejos de gólgota o de Belén, la historia de la crucifixión de Jesucristo se repite todos los días en el lago Titicaca. La incultura ambiental, la indiferencia del hombre, la falta de conciencia de nuestros coterráneos, está matando al lago.
Ese lago que se pintaba como sagrado, milenario, turístico, misterioso, ahora se pinta como descuidado, desagradable y hasta abominable y putrefacto; o sino preguntemos como imagina nuestro lago un niño que asiste a educación inicial.
Las muñecas de Jesús esta vez son clavadas en el Titicaca. Cada vez que quemamos totorales, cada vez que echamos basura, cada vez que miccionamos o evacuamos en la bahía interior de Puno, el sufrimiento de la madre de la naturaleza se asemeja al sufrimiento de Jesús en la cruz.
Las inoperancia de la instituciones como el PELT, ALT, EMSA-Puno, Municipalidad Provincial de Puno y Gobierno, que según el Colegio de Ingenieros, en los últimos 30 años gastaron más 30 millones de soles en proyectos y nada en ejecución de obras, son para el Titicaca, lo mismo que sintió Jesús con la imposición de la corona de espinas.
De no ser el egoísmo y la traición que impera en los gobiernos de turno, la situación actual del lago ha podido ser diferente. Estos pésimos funcionarios son los Judas de hoy, malgastaron los fondos del estado peruano y de la cooperación internacional. Estos son los que juran ser hijos de Dios, y con su egoísmo son los primeros que afectan a la naturaleza. Claro, estos malos ejemplares están en todo lado, también los hay en Bolivia y en toda la circunscripción del Titicaca.
En Semana Santa, el milenario Titicaca, también pide clemencia y espera que tomemos una actitud de cambio, de lo contrario estamos condenados a perderlo.
3 de abril de 2007
Alan se acordó de Puno…
Una profunda satisfacción y agradecimiento se contagia en los más de 220 mil habitantes de la ciudad calcetera. El fin a las usuales inundaciones de las calles de Juliaca, es una grata noticia que merece nuestro mayor reconocimiento al gobierno de Alan García; esperemos el mes de agosto para aplaudir el inicio de obras, seremos vigilantes en el periodo de construcción y festejaremos al son de Serpentina Roja su inauguración.
El proyecto que le costará 134 millones al gobierno central (98%) y gobierno local de Juliaca (2%), permitirá la construcción de obras para la canalización de aguas pluviales. Desde hace 80 años, el mayor problema de esta tierra calcetera son las inundaciones producidas por las intensas lluvias de enero y febrero, y hoy por fin podemos hablar de soluciones para una urbe que nació sin mucha planificación, tal como sucede con todas las ciudades del altiplano.
En junio del año pasado, al concluir las elecciones de segunda vuelta, cuando Puno se consolidó como bastión de Ollanta Humala al otorgarle un 69.59%, lo dijimos, a pesar de todo esta región atraerá la atención del presidente García y así fue. En noviembre del año pasado en su afán de conquistar los votos del ollantismo, Alan García lanzó el shock de inversiones, el mismo que tiene serios inconvenientes en la actualidad, pero la población tiene las esperanzas de concretar la irrigación de Lagunillas. Más adelante en febrero el mismo garcía lanzó la implementación del Plan Ganadero desde el olvidado distrito de Mañazo.
Y ahora anuncia la ejecución de las obras que permitirá la canalización de aguas pluviales en Juliaca. Al parecer, el juego político de Alan García en cuanto a Puno le será rentable, hay un buen número de puneños que además de disfrutar o aborrecerse con su verborrea, termina convenciéndose que este gobierno a diferencia de los anteriores le prestará atención.
Es cierto que las obras anunciadas no son suficientes para lograr el despegue del altiplano, pero sí constituyen un buen gesto de parte del gobierno central. Ahora hay que exigirle que los cumpla en los plazos previstos.
El proyecto que le costará 134 millones al gobierno central (98%) y gobierno local de Juliaca (2%), permitirá la construcción de obras para la canalización de aguas pluviales. Desde hace 80 años, el mayor problema de esta tierra calcetera son las inundaciones producidas por las intensas lluvias de enero y febrero, y hoy por fin podemos hablar de soluciones para una urbe que nació sin mucha planificación, tal como sucede con todas las ciudades del altiplano.
En junio del año pasado, al concluir las elecciones de segunda vuelta, cuando Puno se consolidó como bastión de Ollanta Humala al otorgarle un 69.59%, lo dijimos, a pesar de todo esta región atraerá la atención del presidente García y así fue. En noviembre del año pasado en su afán de conquistar los votos del ollantismo, Alan García lanzó el shock de inversiones, el mismo que tiene serios inconvenientes en la actualidad, pero la población tiene las esperanzas de concretar la irrigación de Lagunillas. Más adelante en febrero el mismo garcía lanzó la implementación del Plan Ganadero desde el olvidado distrito de Mañazo.
Y ahora anuncia la ejecución de las obras que permitirá la canalización de aguas pluviales en Juliaca. Al parecer, el juego político de Alan García en cuanto a Puno le será rentable, hay un buen número de puneños que además de disfrutar o aborrecerse con su verborrea, termina convenciéndose que este gobierno a diferencia de los anteriores le prestará atención.
Es cierto que las obras anunciadas no son suficientes para lograr el despegue del altiplano, pero sí constituyen un buen gesto de parte del gobierno central. Ahora hay que exigirle que los cumpla en los plazos previstos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)